Ceuta Ya! ha realizado un llamamiento formal al Gobierno español, instando a poner fin de inmediato al comercio de armas con Israel. Esta solicitud surge en respuesta a las recientes revelaciones de que el Ministerio de Defensa autorizó un lucrativo acuerdo de armamento por valor de doscientos millones de euros con una empresa israelí, según informó el periódico «El Salto» el pasado miércoles.
Mohamed Mustafa, líder del grupo político local, redactó una carta dirigida al presidente Pedro Sánchez, denunciando el acuerdo de armas como «sumamente grave» e «intolerable». En la carta, Mustafa expresó una profunda vergüenza como ciudadano español, lamentando que «nuestro dinero esté financiando el genocidio».
Mustafa criticó además la postura política del gobierno con respecto a la situación en los territorios palestinos, calificándola de «inaceptable». Recordó al presidente Sánchez las declaraciones engañosas del ministro Albares que afirmaban un congelamiento de las ventas de armas, resaltando la falta de consecuencias por tal desinformación.
«¿Cuántas imágenes de niños hambrientos son necesarias? ¿Cuánta degradación moral debemos presenciar para que el Gobierno español adopte una postura de rechazo y condena hacia un estado que viola sistemáticamente el derecho internacional?» Estas son algunas de las preguntas contundentes planteadas por Ceuta Ya! en su carta al Gobierno.
Ceuta Ya! se niega rotundamente a ser cómplice de políticas equiparables al exterminio de un pueblo entero, instando al Gobierno a poner fin a esta «indignidad». Mustafa, tanto como miembro de la Asamblea de Ceuta como Secretario General de una fuerza política que representa a miles de ciudadanos, reiteró la demanda de romper todos los lazos diplomáticos y comerciales con Israel. Además, instó a España a apoyar la acción legal de Sudáfrica contra el estado acusado de genocidio.
En conclusión, Mustafa afirmó que «no podemos soportar más vergüenza». Ceuta Ya! se mantiene firme en su convicción de que España debe adoptar una postura principista contra la injusticia y las violaciones de los derechos humanos, especialmente en sus relaciones internacionales.
